Como todos los años llegada esta fecha intentamos entre cierres de programas y apertura de los nuevos hacer un necesario balance del año.
A pesar de la crisis económica para AIPC Pandora ha sido un año muy bueno. ¿Por qué? Porque nos ha permitido seguir implementando y reafirmando nuestra metodología de Participación y Desarrollo en la que tanto creemos y que tan necesaria es en este orden mundial que se está imponiendo en forma de crisis de todos los colores.
Como es sabido, nuestra herramienta para promover la participación son los programas de Movilidad Internacional, fundamentalmente Voluntariado Internacional y Microproyectos de cooperación. En estos programas, nuestros mantras como que “el voluntariado tiene la facilidad de llegar donde nadie llega, accediendo a información privilegiada sobre la situación de poblaciones vulnerables”, se ha repetido cientos de veces este año, produciendo esos resultados tan satisfactorios como son los pequeños diagnósticos que cada participante hace de las situaciones que vive en los Países del Sur y que todos tienen en común el diseño de estrategias conjuntas entre la participación voluntaria y la participación comunitaria local. Es verdad que sólo una pequeña parte acaba implementándose, pero simplemente la capacidad de conocimiento de la situación, diagnóstico y multiplicación, nos sirve de base para la promoción de la tan deseada Cultura de la Solidaridad.
El papel fundamental de las personas voluntarias
Esto es lo que han hecho gran parte de las 197 personas que han participado en Microproyectos, las 25 personas que han participado en voluntariado individual, los 60 voluntarios y voluntarias europeos, y 130 personas voluntarias locales que han viajado por el mundo y llevado en su mochila los valores que promovemos desde la entidad. Normalmente compartir los valores que conllevan las palabras paz, solidaridad, convivencia o interculturalidad es relativamente sencillo, pero bien distinto es promoverlo, ya que para ello lo primero es dar ejemplo, para lo cual se ha debido de interiorizar, es decir mirar un poco más hacia el mundo y un poco menos hacia las necesidades individuales, ardua tarea que han conseguido cerca de 500 personas que este año han viajado por el mundo con nuestros proyectos. A todos/as vosotros y vosotras MUCHAS GRACIAS.
Pero para promover la Cultura de la Solidaridad, no solo basta con números, sino que los contenidos y los mensajes son fundamentales. Por ello, desde nuestro Departamento de Educación para el Desarrollo hemos puesto en marcha un gran curso, reconocido por la Universidad Complutense de Madrid: Curso Avanzado en Participación y Desarrollo, donde además de contenidos teóricos y prácticos, nuestros alumnos y alumnas ponen en práctica la metodología aprendida y experimentan por si mismos los retos del sistema internacional de cooperación hoy en día. La segunda promoción está terminando de formarse y visto el éxito de este aprendizaje en el último trimestre del año hemos preparado un segundo curso en Inmigración y Ciudadanía que viene a ampliar la visión de la movilidad en sentido apuesto desde la perspectiva del inmigrante y de cómo las diferentes sociedades son capaces de transformarse con la interculturalidad y de activar o no valores solidarios.
No menos importante ha sido el trabajo en el departamento de Participación y Desarrollo, fruto de estas experiencias y diagnósticos de nuestras personas voluntarias como han sido la construcción de un comedor y aula-multiusos para la población albina en Tanzania, la construcción y puesta en marcha de una panadería en un Centro de Educación Popular en Perú, la continuidad del apadrinamiento de guarderías en Sudáfrica y nuestro programa de apadrinamientos escolares en Mali. En esta línea es muy importante destacar la experiencia del grupo de las 14 personas que participaron en los Microproyectos de Mali, de dónde volvieron totalmente convencidos de la necesidad de construir una escuela en Kalassa, Sibi a 50 km de Bamako.
Para apoyar estos proyectos el Departamento de Comunicación y Responsabilidad Social durante el año ha organizado y apoyado diferentes eventos con el fin de captar fondos destinados íntegramente a las poblaciones beneficiarias. Se han desarrollado dos mercadillos solidarios, uno en marzo y otro en diciembre para los proyectos de Tanzania y Mali, monólogos solidarios, fiestas, exposiciones fotográficas, rifas y comidas, muchas de ellas protagonizadas por las personas voluntarias que han participado directamente en los proyectos.
Dentro de nuestras buenas noticias, tenemos también que conceder un lugar privilegiado a nuestra Escuela de Idiomas que ha incrementado en un 30% sus programas y servicios a empresas, lo cual quiere decir que muchas personas tiene cada vez más herramientas lingüísticas para practicar la comunicación intercultural y que nuestra estructura cuenta con más recursos para seguir trabajando en los programas humanitarios que nos ocupan.
Pero todo esto no se hace solo con ilusión y voluntariado sino que hace falta la existencia de un gran equipo humano, con el que hemos tenido la suerte de contar y reforzar durante este año 2011. Trabajamos muy duro pero con muy buenos resultados y eso denota una gran capacidad tanto humana como profesional del equipo de AIPC Pandora, que a base de horas y de ingenio estamos consiguiendo sobrevivir a esta crisis económica. A todas ellas y ellos, desde aquí, MUCHAS GRACIAS.
Nuevos Retos para sumar y seguir
Con estos resultados terminamos el año, pero nos enfrentamos a grandes retos para el 2012. La situación mundial y particularmente nacional es realmente dura, cambiando las reglas del juego, el orden de las cosas, y ofreciendo por fin y según nuestro criterio, una oportunidad y un rol fundamental a la sociedad civil. Con unos estados totalmente arruinados y un sistema financiero en cuestión, ha llegado el momento de pasar de las propuestas a la acción, de que los ciudadanos y ciudadanas, las entidades del tercer sector, las empresas, las universidades y todos los que tenemos una obligación con la sociedad nos convirtamos en actores y actrices del nuevo orden mundial, exigiendo rigor, denunciando lo injusto, lo absurdo y promoviendo el trabajo en conjunto, los partenariados y las alianzas para economizar costes y sumar esfuerzos.
Nuestro plan estratégico ya está saliendo del horno y su característica fundamental es la cooperación entre los diferentes actores y actrices del universo solidario. Desde aquí lanzamos una invitación a todas las personas y estructuras deseosas de trabajar de manera conjunta, y conscientes de que nuestra voz no llega tan alto, nos comprometemos a través de nuestros departamentos de Movilidad Internacional, Comunicación y Responsabilidad Social a llegar lo más cerca de las personas y organizaciones con las que creemos podemos poner en marcha programas que hagan cambiar el mundo.
Nuestros compromisos
Igualmente nos comprometemos a gestionar más y mejor a todas las personas que hacen voluntariados con nuestra organización, generando oportunidades de colaboración al regreso e involucrándolas más en nuestra estructura.
Nos comprometemos a fortalecer nuestra oferta formativa, haciéndola llegar al máximo número de personas y organizaciones, capacitando al voluntariado y profesionalizando en el sentido del conocimiento la labor que realizan todas las personas atraídas por estos programas.
Penúltimo, nos comprometemos a humanizarnos ante la crisis, a no dejar que nos mine la moral y que ni las montañas de trabajo y las malas noticias de un sistema moribundo nos resten fuerza para seguir adelante promoviendo un mundo más justo y solidario.
Y último, nos comprometemos a celebrar nuestro 10º cumpleaños con todos vosotros y vosotras por todo lo alto, haciendo llegar nuestro mensaje lo más lejos posible y ofreciendo el máximo número de oportunidades solidarias que lo permita nuestra estructura.
¡Brindemos por un 2012 cada vez mas humanitario!