Para todos aquellos que este verano estéis pensando en viajar al extranjero, especialmente quienes lo hagáis a países tropicales (los de mayor riesgo), queremos recordaros una vez más la importancia de la vacunación. La semana pasada apareció publicado en los medios de comunicación que, mientras crecen las salidas a países con riesgos, los centros de vacunación han recibido a menos personas en sus consultas. La traducción es tan sencilla como preocupante: cada vez hay más gente que viaja sin las preceptivas vacunas.
¿A qué achacan los expertos este descenso? Muchos hablan de olvidos o, directamente, desconocimiento de los peligros que se corren. Sin embargo, otros lo relacionan con el miedo a posibles efectos secundarios de las vacunas y medicamentos suministrados, ante lo que hay que afirmar que siempre son preferibles a padecer las fiebres o diarreas que provocan algunas de estas enfermedades, como el cólera, la fiebre amarilla o la Hepatitis A, por citar algunos ejemplos.
Como información, aquí tenéis un pequeño resumen de las enfermedades más comunes ante las que hay que prevenirse antes y durante nuestros viajes a países de riesgo:
Por picadura de insecto:
– Malaria o Paludismo: Común en zonas tropicales y selváticas. Hay fármacos preventivos. Se sufren fiebres, dolores articulares y delirios que pueden ser mortales en última instancia.
– Fiebre Amarilla: Se da en áreas tropicales de África y Suramérica. La vacuna es obligatoria, y en muchos países no te dejan entrar sin el preceptivo documento que confirma que has sido vacunado contra ella. Da fiebres, dolor muscular, vómitos, insuficiencia hepática e incluso, la muerte.
– Tripanosomiasis: Conocida como enfermedad del sueño en el África subsahariana y de Changas en Suramérica. Se contagia por picaduras de moscas y chinches. Se inicia con fiebre y deriva en alteraciones nerviosas y muerte.
– Dengue: Se da en áreas tropicales de América, África y el Índico. No hay vacuna totalmente efectiva. Da fiebres, dolor muscular, erupciones y colapso circulatorio en todo el cuerpo.
Por alimento:
– Hepatitis A: Se da en países subdesarrollados sin saneamientos de aguas. Hay que vacunarse y cuidar la alimentación. Da fiebre, malestar y náuseas.
– Poliomelitis: Permanece en Nigeria, India, Pakistán y Afganistán. Existe vacuna. Afecta a la médula espinal y provoca parálisis y atrofia muscular.
– Fiebre tifoidea: Hay riesgo en África y el Índico. Hay vacuna. Provoca malestar y alteraciones del aparato digestivo.
– Gastroenteritis: Muy común en países subdesarrollados, al consumir alimentos crudos, fruta o agua corriente.
Por vía sexual, saliva o sangre:
– VIH y hepatitis B: Especial atención contra las enfermedades venéreas en destinos de turismo sexual. La hepatitis tiene vacuna.
– Tétanos: En zonas pobres se contagia a través de las heridas. Hay una vacuna. Provoca espasmos y hasta la muerte si no se trata.
– Difteria: Se da en países no industrializados. Se contagia con el contacto directo por vía respiratoria y obstruye la garganta. Hay vacuna.
– Meningitis: Vacuna aconsejada para ir a aglomeraciones en países pobres. A través de la saliva y la tos. Da fiebre y trastornos neurológicos.
Los centros oficiales de vacunación internacional nos dirán cuáles son las vacunas que debemos ponernos en función del destino (país y, en algunos casos, región concreta en la que estaremos) y fecha de nuestro viaje. Hay que contactar con ellos y pedir cita, para lo que aconsejamos no dejarlo para el último momento, ya que suelen llenarse con la proximidad del verano. En el siguiente enlace podéis encontrar el Centro de Vacunación correspondiente a vuestra comunidad y ciudad: http://www.msc.es/profesionales/saludPublica/sanidadExterior/salud/centrosvacu.htm