Durante esta semana hemos intentado dar respuestas a todas aquellas necesidades que habíamos concretado la semana anterior, todo esto con nuestra mejor sonrisa y disposición de trabajo.
Hemos tenido días interminables de trabajo, por la mañana acompañábamos al equipo de asesoramiento para las escuelas inclusivas (SAANE), participamos en el día del folklore peruano, elaboramos propuestas para el aula de autismo del centro, y ¡además!, preparamos las sesiones que por la tarde teníamos de talleres con la familia y la formación de los docentes.
Os vamos a explicar brevemente en qué consisten estos talleres y cómo hemos vivido todo este trabajo, que nos ha permitido concienciarnos y acercarnos más a ellos y a cómo viven la discapacidad de sus hijos/as y sus alumnos/as.
– La familia: ¡ha sido todo un aprendizaje para nosotras!, de entrada les agradecemos su participación en las sesiones y la confianza que han tenido con nosotras y hacia el grupo de padres en general, nos han mostrado su lado más tierno y sensible pero con una fortaleza digna de toda admiración.
El principal objetivo de nuestro trabajo es impulsar y cohesionar el grupo de padres, que funcionen autónomamente y con la motivación suficiente para que tengan estabilidad y continuidad a lo largo del curso, organizándose y dinamizando las sesiones dirigidas tanto a la formación de la discapacidad de sus hijos/as, como al asesoramiento en cuestiones relacionadas con la realidad que viven.
¡Disposición, sonrisas y mucho trabajo en Perú!– Los docentes: nos hemos encontrado con muchos tipos de maestros/as y cada uno con su necesidad concreta de formación, atender situaciones de niños/as en contextos tan distintos nos ha supuesto todo un reto profesional.
Actualmente se está implantando la integración de los niños/as con discapacidad en centros ordinarios, lo que supone para el maestro del aula una falta de recursos y formación, por este motivo han acudido con interés a las sesiones de formación. Estas sesiones las hemos planteados muy prácticas, dando nociones de las características principales de cada discapacidad y por otro lado estrategias de intervención, actividades tipo, materiales…
Entre los asistentes también contábamos, por supuesto, con las maestras del colegio CEBE “Tulio Herrera León” que también se mostraron abiertas a cualquiera de nuestras propuestas y sugerencias.
Después de esta larga semana, decidimos tomarnos unos días de relax y merecido descanso en las playas de Máncora, nueve horas de autobús no nos impidió viajar en busca del sol y así recordar que aunque llevemos un mes con el polar, Agosto sigue siendo para nosotras el mes del calorcito, eso sí, cambiamos el tinto de verano por el pisco sour y el Mediterráneo por el Pácifico.