En la sociedad actual los cambios se suceden a una velocidad vertiginosa. La transformación es una constante en nuestras vidas y el futuro se vislumbra con incertidumbre. ¿Están los jóvenes preparados para el mundo que viene? ¿está la universidad ofreciendo los contenidos y programas necesarios para esta formación global?
A día de hoy, somos conscientes de que sistema educativo actual no consigue actualizarse al ritmo necesario y no responde a la demanda de un mundo cada vez más globalizado y cambiante, en el que la tecnología y la automatización presiden la mayoría de nuestras actividades. De hecho, numerosos estudios pronostican el final de muchas de las profesiones actuales y el nacimiento de otras nuevas que ni siquiera ahora podemos imaginar.
En este escenario es evidente que el futuro de la humanidad dependerá en gran medida de la capacidad de adaptación a los cambios que demuestren los jóvenes. Por eso es absolutamente necesario que nuestros hijos desarrollen una serie de nuevas competencias que combinen los conocimientos científicos, lógicos y matemáticos, con la inteligencia emocional, la creatividad, el pensamiento crítico o la empatía. Serán precisamente estas últimas competencias las que les permitirán afrontar con garantías los retos del futuro tanto a nivel profesional como personal.
Al mismo tiempo el mundo está inmerso actualmente en un contexto geopolítico inestable y en cierto modo alarmante, donde la globalización se ha ralentizado debido al crecimiento de movimientos nacionalistas, y donde la irrupción de nuevos partidos de ultraderecha está amenazando la democracia y los valores europeístas.
Por eso es más necesario que nunca que nuestros jóvenes se conviertan en ciudadanos globales, íntegros y responsables, que sean capaces de contribuir a la construcción de un mundo más justo y en paz. Un objetivo que sólo se alcanzará mediante el respeto a la diversidad, la igualdad de oportunidades y la cooperación entre los pueblos.
¿Pero qué es la Competencia Global
y por qué las Universidades deben incluirla?
La Competencia Global es la capacidad de una persona para desenvolverse con éxito en entornos multiculturales, interactuando con respeto, dignidad y responsabilidad y buscando siempre la sostenibilidad y el bienestar colectivo. El Test PISA va a medir esta Competencia por primera vez en 2019 como su cuarta área de análisis, sabiendo que ofrece a los jóvenes la herramienta necesaria para desarrollar las llamadas 3 Cs: Conectar, Competir y Colaborar en un mundo globalizado y de manera sostenible tanto para el individuo como para la sociedad.
¿Y cómo pueden adquirir los jóvenes la Competencia Global?
En primer lugar, es necesario alcanzar una gran alianza entre instituciones políticas, profesorado y empresas para enseñar la Competencia Global en colegios, universidades, organizaciones juveniles, ONGs y los nuevos entornos laborales colaborativos.
En segundo lugar, es esencial incorporar en los programas académicos asignaturas especializadas en la Competencia Global como la empatía, la creatividad o la resiliencia.
En tercer lugar, es imprescindible formar al profesorado en competencias transversales que se sumen a las competencias propias de las asignaturas tradicionales.
Y por último, es necesario incluir un enfoque internacional organizando proyectos educativos globales que permitan a los jóvenes viajar a otros países para conocer otras culturas e idiomas.
En esta línea venimos trabajado en AIPC Pandora desde hace mucho tiempo con universidades españolas, ofreciendo programas internacionales que exponen a los jóvenes a otras realidades, retos, culturas y situaciones que requieren esta combinación de conocimientos técnicos y competencias interpersonales que han de aplicar en contextos desconocidos y complejos, realizando voluntariados y proyectos de intervención directa en entornos en desarrollo que tienen que ver con sus estudios académicos.
Llevamos 16 años comprobando el nivel de aprendizaje y desarrollo de los estudiantes universitarios en la participación de estos proyectos, trabajando con mas de 700 estudiantes al año en proyectos en 57 países.
Nuestro informe de impacto 2018 centrado en estudiantes universitarios nos arroja datos concretos como que el incremento de la Competencia Global de los estudiantes ha sido del 87% según nuestro análisis arrojando otras informaciones tan interesantes como:
Mediante los proyectos, este año hemos interactuado con 54.029 personas y desarrollando mas de 26.672 actividades con comunidades locales al año alrededor del mundo.
Es importante observar que la demanda de experiencias internacionales no tiene que ver con el tipo de estudios, ya que el porcentaje de estudiantes de ciencias y humanidades que elige participar en un proyecto internacional solidario es el mismo. Los jóvenes están movimos por una voluntad de conocer e intervenir en entornos cultural y económicamente distintos, en comunidades locales en países del Sur y cada vez son mas conscientes de que estas experiencias incrementan su Competencia Global básica para desarrollarse como personas y profesionales.
A nivel cualitativo, lo que mas valoran los jóvenes es la experiencia intercultural y humanitaria, el contacto y convivencia con las personas locales y un gran porcentaje de estos jóvenes nos ha dicho que “ha sido una de las mejores experiencias de mi vida”